Eight & Bob Cap d´Antibes 100ml

Eight & Bob Cap d´Antibes 100ml

Agua de Perfume Verde Amaderado 100ml

Eight & Bob Cap d´Antibes era para Albert Fouquet el paraíso. Durante los años 30, en este preciso pueblo de la costa azul francesa, Albert disfrutaba junto a lo más selecto de la aristocracia europea de las largas estancias que se prolongaban desde la primavera hasta el ocaso del verano. En aquella época eran pocos los que tenían el privilegio de disfrutar de ese “lujo discreto” y elegante que empezaba a afianzarse en la Rivera francesa. Albert soñaba con que aquellos momentos perduraran durante el frío invierno parisino. Como todo artista que busca la perfección de su obra dedicó muchas semanas al delicado trabajo. Con paciencia y exigencia para conseguir un perfume cuya esencia evocara los mejores recuerdos de aquel estilo de vida. Así nació Cap d’Antibes, una exclusiva fragancia, elaborada para deleite de su creador.

Este aroma espléndidamente fresco se transforma a lo largo de su uso. Las notas de menta y abedul crean una intensa explosión de hojas de mar, que se suaviza con el aroma tranquilo y terapéutico de las hojas de violeta. Llega una ola constante de canela y vainilla para producir un ambiente dulce y terroso. El cedro y el incienso nutren el acento amaderado que arde en el corazón de esta fragancia dinámica.

Salida: Menta, hojas de violeta y abedul;
Corazón: Canela, musgo y notas verdes;
Fondo: Cedro, incienso y vainilla.

EIGHT & BOB CAP D´ANTIBES

Eight & Bob fue creada por Albert Fouquet, hijo de un aristócrata parisino, el cual fue parte de la elite francesa a principios del siglo XX. Y además un gran conocedor de los perfumes. En una habitación de la primera planta del castillo familiar, Fouquet creó varias esencias para su propio uso personal. En los acontecimientos sociales siempre sorprendía por las fragancias exquisitas que llevaba. Y se hizo cada vez mayor la demanda de estas dentro del círculo social exclusivo que frecuentaba. Sin embargo, Fouquet rechazaba continuamente las ofertas que le llegaban para sacar al mercado su fragancia.

Pero lo que le hizo destacar fue que una noche de las vacaciones del verano de 1937 en la Costa Azul, Albert fouquet simpatizó con un joven estudiante norteamericano que recorría Francia en un descapotable: John F. Kennedy. A los pocos minutos de ser presentados, JFK ya se había encaprichado con la esencia que utilizaba Albert. La simpatía que desprendía Kennedy convenció a Albert para dejarle a la mañana siguiente en el hotel un ejemplar de su anónima colonia, con una nota: “En este frasco encontrarás la dosis de glamour francés que le falta a tu simpatía americana” .

A la vuelta de sus vacaciones Albert recibió una carta de JFK desde EEUU agradeciéndole el detalle y comunicándole el éxito que había tenido el perfume entre sus amistades. Le rogaba que le enviara 8 ejemplares, “…y si su producción se lo permite, otro más para Bob”. De ahí su nombre Eight & Bob y el resto, es ya historia.

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